El referente de La Libertad Avanza, Javier Milei, fue el precandidato presidencial más votado en las Elecciones Primaria Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) 2023 de Argentina, con el 30,04% de los votos. En segundo lugar, se ubicó el precandidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, con el 21,4%; y, en tercera posición, la precandidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, con el 16,98%. Aunque, si se suman los votos del precandidato Horacio Rodríguez Larreta, que perdió la interna frente a Bullrich, la fuerza opositora queda en segundo lugar.
El punto es que ninguna de las 12 encuestas relevadas por Chequeado predijo que Milei alcanzaría el 30% de los votos, pero la que más se acercó al resultado obtenido por el referente de La Libertad Avanza fue la consultora Zuban Córdoba, que estimó un 24,5% de intención de voto. Es decir, la diferencia fue de 5,5 puntos porcentuales frente a los resultados oficiales finalmente obtenidos.
La encuesta que más falló en su proyección fue la de la Consultora en Imagen y Gestión Política (CIGP), que planteó que el precandidato libertario obtendría el 13,8% de los sufragios, más de 16 puntos porcentuales de diferencia.
Por otra parte, ninguna de las consultoras anticipó que Milei obtendría más votos que Massa. Mientras que varias sí planteaban que el candidato de La Libertad Avanza superaría a Bullrich en cantidad de votos, como las encuestas de la consultora de Hugo Haime -citada en La Política Online-, CB Consultores y Zuban Córdoba, entre otras.
Si se analiza la votación por fuerzas políticas, La Libertad Avanza -que no tuvo internas en las PASO- se convirtió en la alianza más votada con el 30,04% de los votos, seguida por Juntos por el Cambio, con el 28,27%, y Unión por la Patria, con el 27,27%. Estos resultados son con el 97,39% de las mesas escrutadas.
Tamoco en este caso hubo aciertos por parte de las encuestadoras ya que, en el promedio de las proyecciones, Juntos por el Cambio lideraba los sondeos con el 33%, seguida por Unión por la Patria, con el 29,1%. El espacio de Milei se ubicaba en tercer lugar, con el 18,9%.
Qué pasó con las encuestas en las Elecciones PASO 2023
María Laura Tagina, investigadora de la Escuela de Política y Gobierno de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) y miembro de la Red de Politólogas, destacó en diálogo con Chequeado: “Las fuentes de error en las encuestas son múltiples, aunque las más frecuentes suelen estar relacionadas con el diseño de la muestra (es decir, cómo se selecciona a quiénes responderán la encuesta) y las altas tasas de no respuesta, que es un fenómeno que se advierte en todo el mundo”.
Sobre este último punto, la especialista dijo que, “tradicionalmente, siempre fue difícil obtener respuestas de los extractos sociales más altos y más bajos de la sociedad, pero ahora se advierte que existe un segmento caracterizado por sus actitudes, que son los ‘no interesados en la política’ y los ‘insatisfechos’”. Y agregó: “Este grupo tampoco contesta a las encuestas y eso es un verdadero problema porque un encuestador sólo puede pronosticar el comportamiento de los que responden”.
¿Cuándo se considera que una muestra es representativa de la población? Tagina explicó que “es necesario seguir un procedimiento metodológico que garantice que todos los integrantes de la población que se estudia tengan la misma chance de ser elegidos para responder”, es decir, una selección aleatoria. “Como la aleatoriedad completa es la mayoría de las veces muy difícil de cumplir, es necesario post-estratificar (como cuando se considera una determinada cantidad de personas de cierta edad, género o lugar de residencia) para lograr que la muestra tenga las mismas características de la población”, explicó.
Por su parte, María Eugenia Tesio, doctora en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires (UBA) y ex investigadora en el Centro de Estudios Nueva Mayoría -fundada por el analista político Rosendo Fraga-, planteó en base al análisis de fichas técnicas de las encuestas relevadas por Chequeado que “la mayoría de los sondeos utilizaron muestras no aleatorias, y fueron elaboradas sobre la base de respuestas obtenidas de manera online o telefónica, que habitualmente presentan sesgos en los resultados”.
La experta marcó, además, que “el porcentaje de indecisos (es decir, personas que al momento de la encuesta no habían definido su voto) fue alto en la mayoría de esas encuestas y proyectar eso en base a elecciones anteriores es muy difícil debido al surgimiento de nuevos candidatos, como el caso de Milei”.
Otro punto que se debe tener en cuenta a la hora de analizar la opinión pública es el nivel de personas que no concurrieron a votar. Sobre este tema, Tesio dijo que “eso también incide en los resultados de las elecciones con respecto a lo que pronostican las encuestas”. Además, consideró que “existió un voto vergüenza porque mucha gente no admitió que votaría a Milei, porque algunos de los argumentos del precandidato son considerados políticamente incorrectos”.
Por Mariana Leiva para Chequeado.com
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